Carpaccio de ternera con rúcula y parmesano
Introducción
Carpaccio de ternera con rúcula y parmesano. Sin duda, una ensalada fresca y deliciosa que es ideal para una cena ligera y sana. Este plato es típico de la gastronomía italiana y consiste en finas láminas de carne cruda, en este caso, ternera, con un toque de rúcula y parmesano. El Carpaccio se suele servir como un entrante o un plato principal, y es muy fácil de preparar. En este artículo te enseñaremos cómo hacerlo en casa para que puedas disfrutar de esta delicia italiana sin tener que salir de casa.
Ingredientes necesarios
- 400g de filete de ternera
- 60g de rúcula fresca
- 50g de queso parmesano en láminas
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 2 cucharadas de zumo de limón
- Sal y pimienta recién molida
- Rodajas de limón para decorar
Preparación
Paso 1: Congelar la ternera
Para hacer el Carpaccio de ternera, es importante congelar la carne antes de cortarla. Deja la ternera en el congelador durante al menos una hora. De esta manera, la carne se endurecerá, lo que permitirá cortarla en finas láminas con facilidad.
Paso 2: Cortar la ternera
Una vez que la carne esté congelada, sácala del congelador y córtala en finas láminas. Para hacer esto, utiliza un cuchillo afilado y corta la carne en rodajas muy finas. Es importante que las láminas sean lo más finas posibles para que la carne se cocine con el jugo del limón.
Paso 3: Adornar el plato
Coloca las láminas de carne en un plato grande y plano. Luego, añade un puñado de rúcula fresca en el centro del plato y coloca las láminas de queso parmesano encima de la rúcula.
Paso 4: Preparar el aderezo
En un recipiente aparte, mezcla el aceite de oliva, el zumo de limón, la sal y la pimienta. Bate bien hasta que la mezcla quede homogénea.
Paso 5: Aderezar el Carpaccio
Vierte el aderezo sobre las láminas de carne, la rúcula y el queso parmesano. Asegúrate de que todo esté bien cubierto. Deja reposar durante unos minutos para que la carne se cocine con el líquido.
Paso 6: Decorar y servir
Antes de servir, decora el plato con rodajas de limón. El Carpaccio se suele servir frío, por lo que es recomendable enfriar el plato en el refrigerador durante unos minutos antes de servir.
Consejos adicionales
- Si no te gusta la ternera, puedes utilizar solomillo de cerdo, pechuga de pollo o salmón fresco en lugar de la carne de ternera.
- Si no tienes queso parmesano, puedes sustituirlo por cualquier otro queso curado como el queso manchego o el queso cheddar.
- Para darle un toque fresco a la ensalada, puedes añadir unos trozos de tomate cherry o unos trozos de piña.
Conclusión
El Carpaccio de ternera con rúcula y parmesano es un plato típicamente italiano que se ha vuelto muy popular en todo el mundo. Es un plato sencillo de preparar y perfecto para una cena elegante y ligera. La carne cruda se combina perfectamente con la frescura de la rúcula y el intenso sabor del queso parmesano. Añade un toque de limón y tendrás un plato delicioso que seguramente impresionará a tus invitados. ¡Disfruta de esta deliciosa ensalada y de la gastronomía italiana en casa!